- Ash, hay que averiguar que paso en la fiesta de Rachel, Jade no lo hizo por nada, ella no es así, seguro algo le sucedió en la fiesta – comenté mirando a mi amiga, en la hora del almuerzo después de haber terminado mi comida. Jake estaba a mi lado tomando mi mano cálidamente, trazando círculos en ella con su pulgar.
- Por qué mejor no dejamos esto de lado y seguimos con lo nuestro – pregunto ella a la vez que tomaba de su gaseosa, parecería nerviosa.
- ¿Dejarla de lado? Pero si algunos terminaron en la cárcel como vamos a olvidarlo – me quejé mirando a mi novio, él cual no decía nada hasta el momento.
- ¿Y dónde está Luca ahora? – pregunto mirando a Ashley la cual cambió la expresión y posó su vista en el piso de la cafetería.
- La verdad no lo sé, hoy no lo he visto – informó ella, parecía que algo le preocupaba y que no nos decía lo que era, que nos ocultaba algo.
- ¿Cómo que no lo has visto es tu novio? – pregunto Jake, todavía jugando con mi mano.
- Bueno la verdad es que… - se acomodó sobre la mesa jugando con sus manos nerviosa – ¡le prohibieron salir conmigo! – dijo y automáticamente las lágrimas comenzaron a salir de sus ojos, dejó caer la cabeza sobre la mesa escondiéndola entre los brazos.
Me levante de mi siento y solté la mano de Jacob para ir junto a ella, la abracé por los hombros y coloqué mi cabeza a su altura para que pudiera escucharme.
- Sabes bien que eso no pasara ¿verdad? – Le pregunte acariciando su cabello – él te ama, no te dejaría nunca.
- Pero la madre dijo que lo sacaría del colegio si me hablaba – contó Ash volteando la cabeza hacía donde yo estaba.
- ¿Pero por qué le ha dicho eso? – pregunto Jake totalmente desconcertado por lo que ella nos contaba.
Él al igual que yo sabíamos bien que Ash y Luca prácticamente vivían juntos ya, salvo por el hecho de que cada uno tenía su casa donde dormían después de eso estaban siempre uno al lado del otro como yo lo estaba con Jake.
Sabíamos que sus padres no les habían prohibido el estar juntos, que les permitían verse al menos hasta hoy todo eso era así.
- Ella dijo que el directo llamo a la y le contó lo que supongo le dijo a todos los padres y ella le creyó ahora Luca está castigado y no puede vernos, me lo ha dicho por un mensaje y hoy no lo he cruzado en toda la mañana, no sé dónde estará, creo que no ha entrado hoy ya que no estuvo en mis clases, las que estoy con él, no sé qué hacer, quiero verlo.
- Siempre supo que su mamá es algo estricta, pero no pensé que para tanto – comentó Jacob con el ceño fruncido de la bronca que sentía en ese momento.
No era justo que lo castigaran así, está bien, si, nos habían portado muy mal, pero no era cuestión de cortar las amistades por una fiesta. Podría ser un castigo menor.
Ahora me sentía culpable por ir a esa fiesta, una fiesta que habíamos organizado por el fin de año escolar para disfrutar una noche juntos, pero ahora sabíamos que una fiesta no valía la pena que si nuestros padres reaccionarían de esa manera era mejor no tener una vida social, para que después no nos dejaran vernos entre nosotros.
Teníamos que encontrar la manera de saber que había ocurrido en la fiesta con Jade y donde estaba Luca en ese momento, no era cuestión de dejarlo pasar, porque ambos son nuestros amigos y necesitan de nuestra ayuda.
- No te preocupes Ash, vamos a buscar a Luca y también vamos a averiguar que paso con Jade en la fiesta – dije con mi mano sobre su brazo para darle fuerzas.
Teníamos que saber de inmediato que había ocurrido con Jade ya que por su culpa Rachel había sido expulsada del colegio. Averiguaríamos lo que había provocado que ella llamara a la policía en medio de la noche, en una fiesta en la que todos nos divertíamos.
De todas las fiestas a las que había concurrido desde que mis padres habían comenzado ha viajar cada una o dos semanas sin importarles a donde yo fuera. Esta había sido la única en la que algo así ocurría. Nunca nadie había llamado a la policía. Nunca nadie había sido expulsad del colegio por festejar en su propia casa, cuando la fiesta no era cosas del instituto.
- Después del colegio voy a ir a casa de Luca - comenté Jake aún sentado enfrente de nosotras.
- Bien, yo iré a la casa de Jade – informé y luego miré a Ashley que seguía llorando - ¿Vienes?
- Si, aunque quiero ver a Luca – dijo desesperada.
- No te preocupes si todo va bien lo vamos a ver pronto – quise tranquilizarla y decirle que todo iba a ir bien pero eso nunca lo sabría porque era algo raro lo que nos ocurría. Parecía cosa de película, esas cosas que pasan en las de terror y no en la vida real. Pero acá estábamos nosotros intentando averiguar qué había pasado con nuestros amigos el día de la fiesta y luego de ella. No podíamos dejar que todo siguiera como estaba porque no entendíamos que era lo que estaba sucediendo.
Etiquetas: Buscando cariño, Capítulo VIII, novela
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